«La gente está cansada» y la respuesta de Edesa es la que mejor le sale, “patear la pelota” y desligarse; “les informamos que deberá re direccionar su pedido a los organismos correspondientes, sin otro particular saludamos a ustedes atentamente”.
Vecinos de barrio Mataderos esperan desde 2018 que Edesa cumpla la promesa de brindarle luz legal, si, luz legal, «no queremos nada gratis, queremos pagar».
La concreción del expediente n328/10 de tendido de energía eléctrica y agua potable para el barrio sigue durmiendo y ni Lapad Mashur, Edesa, Ente regulador, Concejo Deliberante, etc., parecen importarle ya que los vecinos recurrieron a todos ellos sin obtener respuesta.
Los departamentos del norte salteño son los más castigados por distintas problemáticas que todos conocen, pero los que tienen poder para cambiar las cosas, no hacen nada.
La tinta de las notas que enviaron desde 2018 ya padece el paso del tiempo y se encuentra borrosa, clara metáfora del olvido, un reclamo eterno de los vecinos de la localidad de Santa Victoria Este que viven, hace casi 4 años, los peores temores de un ciudadano, sufrir por la luz y el agua. Servicios básicos para poder progresar.
Vecinos de Barrio Mataderos iniciado en el 2018 y hoy compuesto por más de 150 familias se cansaron de mandar cartas a todos los organismos posibles para lograr tener tendido de luz y agua y pagar correctamente, pero, a Edesa y a las autoridades municipales poco les interesa.
Juan, un vecino relató al portal Elsalteñoaldia.com, que al no tener respuesta tuvieron que colgarse de la red eléctrica donde los cables rozan espejos de agua donde juegan los niños.
“Los cables rozan las cañadas, que son corredores de agua. En muchos lugares están a 30 cm del suelo. Somos 150 familias que queremos tener luz legal. La intendencia tiene conocimiento de este pedido. Tenemos dos diputados elegidos que vinieron al barrio, pero hasta ahora no hicieron nada”, expresa Juan, hastiado de la situación.
“Estamos colgados precariamente Edesa lo sabe y ellos son conscientes de los peligros que acarrea. No hay medidor, no hay luz de noche, nos iluminamos con un foquito en la galería de las casas.
«Acá si pasa algo nos dirán que el colgado ilegal no tiene derecho a nada ni a reclamar».
En las últimas semanas el país atravesó por una ola de calor que arremetió con dureza en algunos sectores del país, y donde departamentos de Salta llegaron a temperatura que rondaron los 50 grados, “Acá a las 14 horas se corta el agua ese es otro reclamo. Lo único que queremos es tener luz para enfriar una botella cuando hay agua».
Con respecto a la situación del agua relataron, “Estamos conectados por mangueras que nosotros pusimos. Y otra de las problemáticas del barrio sucede en época de lluvias, “las calles en mal estado se vuelven intransitables, y cuando llueve quedamos literalmente aislados».