Gustavo Sáenz(Salta), Gerardo Morales(Jujuy) Juan Manzur(Tucumán) , Raul Jalil (Catamarca) y Gildo Insfran( Formosa).
El intento de magnicidio contra la vicepresidenta de la Argentina tuvo repercusión internacional y tuvo el repudio de algunos dirigentes latinoamericanos, entre ello Evo Morales.
Los dirigentes oficialistas y opositores coincidieron en que la grieta debia disolverse en solidaridad a CFK, rechazando tan grave atentado contra la vida y la seguridad institucional de un país.
Entre los gobernadores que se hicieron eco, estuvieron los dirigentes de provincias del norte quienes, en común sintonia, adhirieron a que el camino no es la violencia.