Esta decisión estaría avasallando la autonomía de la Facultad de Humanidades.
Desde «la División del Servicio Penitenciario Federal del NOA invita a ud. del acto de apertura del ciclo lectivo 2023 y del lanzamiento de la carrera universitaria ‘Licenciatura de Ciencias de la Comunicación Social‘ dictada por la Universidad Nacional de Salta», reza el comunicado con sello de la cárcel de Güemes.
Lo polémico e irregular de este proyecto educativo para la presos federales (muchos vinculados a delitos de narcotrafico) reside en que para dictar una carrera en contexto de encierro se debe regir por el Estatuto mediante un convenio y la autorización de la Facultad, pasos que el Rectorado desestimó y lanzó de lleno la carrera.
En el estatuto, las sedes regionales son órganos que son administrados por la Unsa dependientes de la Facultad que dictan las carreras, sin embargo, el dictado de esta carrera no cumple este proceso y fue directamente aprobada por el Rectorado.
Fuentes internas del ámbito académico cuestionaron este accionar «nadie estaba enterado de este proyecto. El rectorado no es el órgano encargado de autorizar dicha carrera».
Cabe destacar que la Universidad Nacional de Salta hasta hace poco dictaba la carrera en la cárcel de Villa las Rosas sin embargo al terminar el convenio, los tres docentes que asistían al lugar ya no contaban con garantías de seguridad por lo cual se hizo difícil sostenerla.
A todo esto, y como «frutilla de postre» este lanzamiento que ninguna autoridad universitaria informó tampoco fue comunicado al personal docente que supuestamente sería el que dicte dicha carrera:
«Los docentes de la carrera no fuimos informados.La escuela no presentó ningún proyecto a la Secretaría Académica ni al Consejo Directivo para emitir resolución. Tampoco se firmó un convenio con el Penal Federal ni se elaboró un Protocolo como tiene el proyecto Contextos de Encierro en penal provincial», denunciaron.
