Aseguran que el conflicto docente «deja sin presencia policial» a los barrios.
Barrio la Paz perdió «la paz» por la inseguridad.
Robo de medidores, casas apedreadas, se acrecentan las peleas de adolescentes y los escasos policías que tenían están abocados al conflicto docente.
Vecinos de zona sureste, más precisamente Barrio La Paz, no aguantan más. El barrio que está ubicado frente a avenida Pontussi y cerca de la ruta N26 sufre incontables hechos de violencia que hacen imposible el diario vivir sea de día o de noche.
«Tocan las puertas y salis y no hay nadie. Tiran piedras para saber si están en la casa. Muchos vecinos sufrieron el robo de los medidores de gas. La gente tiene miedo de bajarse en las paradas porque te apuran con cuchillos. Y ahora la familia debe esperarlos cuando llegan» detalla una vecina con desesperanza.
También observan el crecimiento de las peleas callejeras entre adolescentes y lo asocian al paro docente. Indican que los chicos al no tener clases salen a la calle y comienzan las peleas que cada vez son más violentas «se tiran piedrazos y es imposible salir. A veces pegan en las casa por eso es preferible no meterse porque te puede caer una. Los chicos no van a la escuela y se pelean en la calle, todo es una guerra. Antes iban a estudiar», y agregan «el tema docente nos está perjudicando. No estoy en contra pero no es el momento. Deberían estar agradecidos de que tienen trabajo».
En la zona están destinados dos móviles policiales pero por las manifestaciones docentes solo quedó uno y los pocos policías patrullan en un horario y «se van y esto se convierte en tierra de nadie, ya no es un barrio tranquilo. Tenemos miedo», indicó.
Los vecinos reclaman mayor presencia policial y solicitan penas más efectivas para los menores de edad que delinquen como también convoca a las familias para que se avoquen a contener a sus hijos.