Enorme alegría para el gobierno argentino al tener «el visto bueno» del Instituto Gamaleya al primer lote de vacunas producidas en el país.
El mandatario felicitó al titular de Richmond por la producción completa de las vacunas contra el coronavirus y le agradeció “de corazón en nombre de todos los argentinos”. Aseguró que se trata de “un avance infinito porque es muy importante que en un tiempo como el que vive el mundo en la Argentina estemos produciendo una vacuna de la calidad de la Sputnik V”.
“Nos llena de orgullo. Y más allá de lo que podamos ayudar nosotros desde el Estado el mérito es tuyo, que invertiste para que la Argentina esté en condiciones de producir lo que está produciendo y de suministrar las vacunas que tanto necesitamos. Es un enorme orgullo que un laboratorio argentino tenga la capacidad tecnológica como para desarrollar un producto tan cuidado y tan especial como una vacuna de la naturaleza de la vacuna contra el COVID-19”, destacó.
Fernández remarcó que Argentina está dando “un paso importantísimo” en el desarrollo de vacunas contra el coronavirus. Destacó que lo hizo gracias a “una empresa privada, que puso la tecnología” en función de esta producción. Además, sostuvo que este es “el mejor homenaje” que se puede hacer a los 100.000 fallecidos por Covid-19 en un “día triste”, como fue ayer.
Por su parte, Figueiras también manifestó estar orgulloso por el logró y transmitió su agradecimiento “a todos los que colaboraron con este proceso para poder llegar en tan poco tiempo a cumplir con este desafío, a la Presidencia, a los ministerios de Salud, de Economía y de Desarrollo Productivo, y a la ANMAT, que nos apoyó y nos guió, a nuestros colegas de la industria farmacéutica, especialmente a MR Pharma, y a tantas compañías de la Argentina y del exterior que nos han ayudado, y especialmente a nuestros científicos, médicos, técnicos, profesionales que dieron todo y lo seguirán dando”.
A partir de la transferencia de tecnología del Instituto Gamaleya se posibilitó que Argentina pueda producir vacunas contra COVID-19, con probada eficacia y seguridad, para la población argentina y con una mirada regional, lo que posiciona al país como un actor clave en la elaboración de vacunas en el mundo.
Esta etapa denominada fill and finish consiste en el llenado y acondicionamiento final de la vacuna, etapa productiva conducida en instalaciones segregadas, dedicadas exclusivamente a la producción de los componentes 1 y 2 de vacuna Sputnik V.
Asimismo, la ANMAT fiscalizará y verificará por medio de la liberación de los lotes elaborados para que los mismos cumplan con todo el proceso de control de calidad necesarios para el cuidado de la población.
Fuente:El Economista