El Diputado del Bloque Memoria y Movilización Social plantea que la constante presión de los padres en el desarrollo de prácticas deportivas puede crear hábitos poco saludables, lesiones y enfermedades mentales o sicológicas.
El Proyecto Expte. Nº 91-48.426/23 no tiene dictámenes de las Comisiones de Mujer, Género, Diversidades, Niñas, Niños, Adolescentes y Familia; de Cultura y Deporte; Derechos Humanos, Personas Mayores y Defensa del Consumidor; de Hacienda y Presupuesto; y Legislación General.
De acuerdo a lo argumentado, la actividad física se trata de un campo privilegiado de experimentación y descubrimiento para los niños, adolescentes y jóvenes. En especial si se tiene en cuenta que a estas edades se produce una etapa de socialización en donde se va configurando la propia personalidad.
La constante presión de los padres o tutores en el desarrollo de estas prácticas deportivas puede crear actitudes defensivas en los niños, pueden desarrollar hábitos poco saludables, lesiones y enfermedades mentales o sicológicas. La importancia de poder identificar las habilidades de su hijo y asesorarlo sobre cómo desarrollar sus talentos no tiene que ver con triunfos efímeros sino con una educación en valores.
Leiva plantea que el proyecto busca que los niños, niñas y adolescentes, puedan desarrollar sus prácticas deportivas y competitivas, acompañados por sus padres o tutores, sin presión, sino con el único objetivo que la educación deportiva les permita insertarse de mejor manera en la sociedad, desarrollando sus virtudes con sus pares, sin estar atados a resultados deportivos.
