Se trata de la Escuela San Cayetano N° 4613 del Paraje El Algarrobal, Pichanal.
No tener agua un día puede tornarse un caos, y agravado por las altas temperaturas, es una tortura.
Y si esa situación se produce en una escuela del interior pero que no tiene agua desde el inicio del ciclo lectivo, tal abandono del estado no tiene perdón.
El nombre de la Escuela San Cayetano, lejos está de ser protegida por los santos ya que son los funcionarios los que debieran garantizar derechos y proteger al alumnado, sin embargo, esto no estaría pasando.
La humilde escuela rural ubicada en El Algarrobal, el ardiente Chaco Salteño, carece desde hace meses de un elemento vital para funcionar: el agua potable.
Tras la falta de respuestas, su directora Ana Terreyra, tuvo que recurrir a organizar una campaña solidaria, «acudiendo a su buen corazón pedimos donación de bidones».
Lo solicitado,»bidones de agua» es para los alumnos que asisten a la institución y de acuerdo al relato en la nota, la escuela se abastecia de agua de una casa contigua sin embargo el líquido no era potable por lo cual, ante la llegada del clima cálido, no tener agua potable no es una opción.
Nota de la directora Ana M. Terreyra