“Los narcos van a terminar ocupando un barrio” advirtió Susana González, una madre que lucha contra el paco y que implora, desde hace años, que se declare la Emergencia Juvenil en la provincia de Salta.
“Yo era agente sanitario y visitaba familias que se destruían por la droga pero nunca creí que me iba a tocar a mí”, comenzó el relato una mujer que lucha contra una problemática que crece a pasos agigantados en la provincia de Salta; el consumo de pasta base.
Susana González, una mujer con evidente fortaleza, contó cómo la droga cambió su vida para siempre pero aseguró que hasta el último suspiro buscará que alguno «de los responsables pague».
“En el 2009 me entero que mi hijo, que estaba yendo a la secundaria, se estaba drogando con pasta base”.
En una extensa entrevista, Susana relató una historia de lucha personal y colectiva contra la problemática de las adicciones y los dealers, vendedores minoristas del negocio del NARCOTRÁFICO, un circuito económico que mueve millones a costa de la vida de jóvenes y niños de los barrios periféricos de Salta.
Así también, entre los detalles que aportó, confirmó «una verdad a gritos»; la connivencia de los distribuidores de droga con la Policía de Salta.
“Creí que era la solución llamar a la policía y denunciar a los que vendían droga. Vinieron los de Drogas Peligrosas, los llevo al que le dicen el “chancho” en Siglo XXI. Cuando mi hijo se escapa porque estaba encadenado, vi el mismo auto que fue a mi casa y los mismos policías darse la mano con los transas y me cayó la ficha, estos sinvergüenzas también están prendidos. Tomé el número de patente y fui a la Jefatura, estaba el Dr. Gonzales y Silisque que después de discutir me dijeron que me quede tranquila pero nunca se pudo hacer nada”.
“Mi hijo pesaba 40 kilos y media 1.60 No podía creer que era un cadáver andante”.
De las madres fundadoras de la organización contra el paco, algunas continúan, otras abandonaron la lucha porque sus hijos ya no están, pero coinciden en la falta de políticas de los gobiernos provinciales frente al avance del narcotráfico y el narcomenudeo en villas y barrios de la capital y el interior;
“Nunca nos creen. Le dijimos a Urtubey que había narco policías nos llamó locas. El único que buscó ayudarnos fue el ministro Mascarello”.
Por intentar salvar a su hijo de los distribuidores de droga, Susana realizó un trabajo exhaustivo de investigación para dar con los responsables, y hasta llegó a disfrazarse de «pipera» para revelar la ubicación de los «aguantaderos» pero nunca tuvo repuesta de la justicia. Entre los lugares que identificó se encuentra el barrio 26 de Marzo, Scalabrini Ortiz, 20 de Junio, SigloXXI y San Benito.
“Me disfrazaba de pipera lo seguía hasta donde el compraba. y hasta compraba».
Por último, ante el actual aumento de consumo de pasta base en jóvenes de distintas barriadas salteñas, Susana reitera con firmeza la necesidad de construir Centros de rehabilitación y de desintoxicación y declarar la Emergencia Juvenil;
“San Benito es la mama de la droga. ¿Sabes lo que era denunciar a dirigentes políticos y que ahora están arriba? Cuando paso por villa San Antonio veo a la mañana a chicos consumiendo al lado de una fogata y cuando vuelvo a la tarde están tirados en la calle. El bajo ya no tiene que existir” alertó.
«Muchos funcionarios de la gestión anterior y el actual venden droga» (….)