«Este fue un golpe contra la credibilidad de la dirigencia», expresó el periodista Jorge Villazón en el programa radial  “Las Ciertas cosas” por La Cigarra 88.7 Mhz.

Editorial|  “Es común hoy que en la calle se pregunte si con lo que hoy gana alcanza para cubrir  las necesidades comunes  y las que venía teniendo, es común escuchar  también que todos dicen, «la verdad que no llego a fin de mes», esto no se necesita explicar.

Parece que no sólo les pasa a los jubilados o, a los trabajadores con sueldos paupérrimos. Le pasa incluso a los comerciantes que no llegan a cubrir sus gastos con lo que venden y ganan.

Le pasa a los industriales, pequeños y medianos, sino que parece ser que les estaba pasando a los senadores y las senadoras nacionales.

Ayer, hubo una gran sorpresa en el Congreso. Primero,  se aceptaron cosas que pedía el Ejecutivo, como por ejemplo la necesidad de aprobación para hacer el placet para 8 u 9 embajadores nuevos, algunos problemáticos pero no importa. El Senado en su conjunto aprobó lo que le había mandado el ejecutivo nacional. Hasta que llegó al final de la reunión de senadores y allí pidió la palabra el senador salteño Juan Carlos  Romero.

Cabe destacar que esto estaba resuelto el día anterior. Esto lo sabía la Vicepresidenta que había participado de la reunión el día anterior. Esto no fue algo que sorprendió a la Vicepresidencia ni tampoco al ejecutivo porque también lo sabía el ministro del interior Guillermo Francos. Todos estaban avisados como el ataque de Irán.

Romero pide la palabra, y dice lo siguiente: “Presidenta obra en secretaría un proyecto de resolución firmado por varios senadores que está en la banca de cada uno para que sea puesto en consideración”, a lo que la Vicepresidenta respondió; “corresponde votar la habilitación a mano alzada del proyecto 15/24 de autoría de varios senadores  que obra sobre las bancas requiriéndose dos tercios de los votos. Aprobado. Corresponde ahora que se lo someta a votación a mano alzada. Aprobado. No habiendo más asuntos que tratar queda levantada la sesión”, concluyó.

Romero dijo que tenía un pedido de varios senadores, en realidad serían 10 senadores, y no es casual porque es el número mínimo que se exige para tratar un proyecto de resolución. No eran varios, eran senadores que representaban a distintos bloques y le pide que se somete a discusión. En ese marco, la Vicepresidenta dijo que debían poner la cámara en discusión porque no tiene dictamen de comisión y se necesitan los dos tercios.

En la sesión se puede votar a mano alzada, también poniéndose de pie, y si no,  se puede votar por el sistema de que,  cada senador da su opinión bajo registro nominalmente y eso queda a la vista en la pantalla y luego como un documento más. Ahí se sabe quién vota positivo y negativo.

Cuando la vicepresidenta dijo, “lo vamos a hacer a mano alzada”,  ningún Senador dijo nada. Si a alguien no le gustaba hacerlo a mano alzada pudo haber pedido la palabra. O puede levantarse e irse pero se dio por aprobado y se aprobó, y terminó la sesión.

En ningún momento dijeron de qué se trataba porque lo único que sabían de que se traba, era la vicepresidenta y los senadores, el público que podía estar viendo no sabía de qué resolución se trataba. Se trataba de una resolución de aumento de dieta.

La paradoja fue que el organizador y el que tenía la voz cantante era el Senador que, por su declaración jurada,  es el más rico de todo el Senado, el senador J.C Romero.

El más rico de todo el senado es el que representó a todos los senadores como voz cantante y fue el primero que firmó la resolución. Es increíble.

Las Cifras

El aumento consiste en que,  lo que va a cobrar cada senador en bruto, lo que el estado debe pagar es 7.200.000 mil por cabeza. Sobre una parte de eso, hay que descontar obra social y jubilación. Sobre cuatro millones de los siete, el resultado final sería de bolsillo aproximadamente 6 millones y unas pocas monedas,  para ellos,  para nosotros plata.

Un jubilado cobra sin el regalo del bono, 170 mil pesos ¿Qué me cuenta?

Ahora a los senadores le pagan 4 millones como dieta pura,  le pagan 1.800.000 mil como gasto de representación, ahí no hay descuento, y le pagan 900 mil pesos por desarraigo.

Por si fuese poco también le dan 10 pasajes de tramo, ida y vuelta, para viajar a Buenos Aires. Es como si trabajaras te paguen el boleto de colectivo, y para que comas también, solo que las cifras son diferentes.

Y la vicepresidenta dijo “todos los bloque votaron a favor”, punto y aparte.

Todos votaron: Ninguno sirve

Todos votaron, cuando digo todos, los peronistas también, los de  Unión por la Patria también. A mí los de LLA me tiene sin cuidado. Lo que vote el PRO me tiene sin cuidado. Preste atención en los radicales por un problema histórico. Pero mi atención más fuerte es sobre los peronistas. Los peronistas votaron todos a favor.

Romero, Sergio Leavy y Nora Giménez, todos votaron a favor. Algunos no estaban habían faltado a la reunión pero es lamentable señores.

Tiene razón Milei en la mitad del relato por twitter cuando dice “esta es la muestra de la casta”, y después dice, “los mío no”, sí, los tuyos también. Esta es la casta y también el vocero presidencial aumentándose el sueldo subiéndose la categoría. Es un escándalo lo que ganan los ministros, los secretarios de estado como Adorni ahora. Es un escándalo.

Vamos a lo que es el salario promedio de los trabajadores registrados en la argentina y vamos a los jubilados. Es un escándalo.Esto está acabando con ciertas cuestiones que parecían intocables.

Los representantes de los partidos que estaban no sirven ninguno. Porque hicieron una maniobra, porque escondieron una maniobra, porque la hicieron para acordar una cuestión que tenía que ver con los embajadores y ni se animaron a decirlo en el senado lo que estaban hablando.

Ningún sirve. No le sirve al pueblo. No le sirven al mandato constitucional que juraron respetar. No le sirven al dios que pusieron la mano sobre la biblia. No le sirven a nadie se sirven a sí mismos.

Es una dirigencia obsoleta. Ya no sirven.

Los peronistas deberán buscar otra dirigencia, los radicales otra dirigencia, los de la Libertad Avanza otra dirigencia, los del PRO otra dirigencia. Porque hicieron algo que avergüenza a la política, traicionaron su juramento y los de la política.

No nos tiremos contra uno nomás, seamos serios. Lo lamento por las personas que conozco, y tiene hoy de mí esta definición. No fui yo, ellos se pusieron ahí solitos.

Esta es la realidad, la única verdad. Lo demás es relato. Este fue un golpe contra la credibilidad de la dirigencia y de los resultados de la democracia. He dicho».

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